¿Nadine después de Milton? Es poco probable que se desarrolle un sistema de tormentas de baja presión
Un sistema de baja presión cerca de las Bermudas tiene muy pocas posibilidades de convertirse en tormenta tropical, lo que significa que los floridanos pueden respirar un poco más fácilmente, incluso mientras se preparan para los impactos del huracán Milton.
El sistema, que se llamaría Nadine si se convirtiera en tormenta tropical, está provocando tormentas eléctricas y fuertes lluvias en las aguas a unas 300 millas al suroeste de las Bermudas y ha estado fluctuando entre un 20% y un 40% de posibilidades de convertirse en un ciclón.
Pero los meteorólogos del Centro Nacional de Huracanes (NHC) le dan un 30% de posibilidades de desarrollarse aún más en las próximas 48 horas, y dicen que las probabilidades disminuyen cada hora.
“Se espera que los vientos en los niveles superiores se vuelvan demasiado fuertes para que se desarrollen más esta noche o hasta el jueves”, dijo el NHC en su informe a las 2 pm del miércoles.
Incluso si la tormenta se convirtiera en Nadine, los estadounidenses en el continente tienen poco de qué preocuparse: el sistema se dirige hacia el este y se adentra directamente en el Océano Atlántico.
“Va directamente al mar, no afectaría a nadie”, dijeron los meteorólogos de Fox Weather al Post.
La noticia seguramente será un suspiro de alivio para los estadounidenses, que todavía se están recuperando de la devastación que el huracán Helene causó en todo el sur a finales de septiembre.
Comunidades enteras fueron arrasadas en los Apalaches cuando las fuertes lluvias provocaron inundaciones catastróficas. Se ha confirmado que al menos 230 personas murieron a causa de la tormenta.
Casi exactamente dos semanas después, Florida se está preparando para enfrentar el huracán Milton, que se ha convertido en uno de los huracanes más poderosos que jamás se haya formado en el Golfo.
Se espera que Milton golpee Florida el miércoles por la noche o temprano el jueves, y las predicciones actuales sugieren que golpeará justo al sur de la Bahía de Tampa.
Pero los meteorólogos advierten que la tormenta aún podría azotar a la propia Tampa, lo que sería devastador para la ciudad baja, ya que marejadas ciclónicas de hasta 13 pies podrían inundar las calles.