Beastie Boys afirma que el dueño de Chili's usó la exitosa canción 'Sabotage' en anuncios sin permiso
Los Beastie Boys demandaron al propietario del restaurante Brinker International en un tribunal federal de Nueva York, alegando que Brinker utilizó la canción “Sabotage” de 1994 del legendario trío de rap para promocionar la cadena Chili's sin su permiso.
El grupo dijo en su denuncia presentada el miércoles que Brinker utilizó ilegalmente la palabra “Sabotage” en los anuncios de Chili's en las redes sociales, insinuando falsamente que los Beastie Boys respaldaban a los restaurantes informales.
Los abogados de los Beastie Boys y los portavoces de Brinker no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios sobre la demanda el jueves.
Los Beastie Boys se formaron en la ciudad de Nueva York en 1981 y se disolvieron en 2012 después de que Adam “MCA” Yauch, miembro fundador, muriera de cáncer. Fueron incluidos en el Salón de la Fama del Rock and Roll a principios de ese año.
“Sabotage” fue un sencillo del álbum de 1994 del grupo “Ill Communication” y ganó fama por su video musical, una parodia de los dramas policiales televisivos de los años 70.
La demanda del grupo decía que Brinker publicó anuncios de Chili's en las redes sociales con la palabra “Sabotage” sin licencia.
También dijo que uno de los anuncios presentaba “tres personajes que llevaban pelucas obviamente al estilo de los años 70, bigotes falsos y gafas de sol” que “pretendían evocar en las mentes del público escenas del conocido video oficial 'Sabotage' del demandante”.
“Los demandantes no licencian ‘Sabotage’ ni ninguna de sus otras propiedades intelectuales para fines publicitarios de productos de terceros, y el fallecido miembro de Beastie Boys, Adam Yauch, incluyó una disposición en su testamento que prohíbe dichos usos”, dice la demanda.
Los Beastie Boys acusaron a Brinker de infringir sus derechos de autor y violar sus derechos de marca registrada. Pidieron al tribunal una indemnización de al menos 150.000 dólares y una orden que impidiera a Brinker utilizar su obra.
El grupo ganó un veredicto del jurado de 1,7 millones de dólares contra el fabricante de bebidas energéticas Monster Beverage en 2014 por usar su música sin permiso.