Malasia devolvió 156 millones de dólares en fondos robados de 1MDB, dice la embajada de Estados Unidos | Corrupción
El embajador de Estados Unidos dice que los activos devueltos pueden usarse con el propósito original de mejorar las vidas de los malayos comunes y corrientes.
Malasia ha recibido 156 millones de dólares en activos relacionados con el escándalo 1MDB después de una investigación por parte de Estados Unidos, según informó la embajada estadounidense en Kuala Lumpur.
El embajador de Estados Unidos en Malasia, Edgard D. Kagan, dijo que los fondos eran el cuarto tramo de activos que se devolverían al país tras una investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
“Esta extraordinaria suma de dinero regresará al pueblo de Malasia, a donde pertenece y donde finalmente podrá ser utilizada para su propósito original: mejorar las vidas de los malayos comunes y corrientes”, dijo Kagan en un comunicado emitido por la embajada a última hora. Jueves.
Kagan se reunió con el primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, el martes para confirmar el último tramo, que eleva la cantidad total de fondos devueltos a 1.400 millones de dólares, dijo la embajada.
Los funcionarios estadounidenses estiman que funcionarios de alto nivel y sus asociados se apropiaron indebidamente de más de 4.500 millones de dólares del fondo estatal de Malasia 1MDB.
El escándalo resultante marcó el comienzo del primer cambio en el gobierno de Malasia en seis décadas, generó investigaciones en seis países y condujo a las condenas del ex Primer Ministro de Malasia, Najib Razak, y del ex banquero de Goldman Sachs, Roger Ng.
Malasia anunció a principios de este año que había recuperado propiedades y otros activos por valor de 23,9 millones de ringgit (5 millones de dólares) del 1MDB, que fue establecido por Najib para estimular el desarrollo económico.
En febrero, la junta de indultos de Malasia redujo a la mitad la sentencia de 12 años de prisión de Najib y redujo la multa impuesta en su contra de 210 millones de ringgit (44,5 millones de dólares) a 50 millones de ringgit (10,6 millones de dólares).
Jho Low, un financiero malasio presunto autor intelectual del plan, fue acusado formalmente en 2018, pero sigue prófugo.
Los funcionarios malasios han dicho que Low se encuentra en China, lo que Beijing ha negado.