Funcionarios de la ONU advierten sobre “errores de cálculo” en la frontera entre Israel y el Líbano | Noticias de Hezbolá
Los funcionarios con base en el Líbano dan la alarma sobre una posible escalada de guerra a medida que se intensifican los combates entre Hezbolá e Israel.
Dos funcionarios de las Naciones Unidas con base en el Líbano han advertido que existe una amenaza “muy real” de error de cálculo que podría conducir a una guerra más amplia a medida que se intensifican los combates transfronterizos entre Hezbollah e Israel.
La advertencia del sábado provino de la coordinadora especial de la ONU para el Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, y del jefe de las fuerzas de paz de la ONU en el Líbano, Aroldo Lazaro.
En un comunicado, dijeron que estaban “profundamente preocupados” por los recientes enfrentamientos a lo largo de la frontera sur del Líbano.
“El peligro de que un error de cálculo conduzca a un conflicto repentino y más amplio es muy real”, dijeron los dos funcionarios.
Instaron a “todos los actores a cesar el fuego y comprometerse a trabajar hacia una solución política y diplomática”.
Declaración Conjunta de @JeanineHennis y @aroldo_lazaro:
Mientras las comunidades en el Líbano y en todo el mundo celebran Eid Al-Adha, la familia de las Naciones Unidas reitera su llamado a todos los actores a lo largo de la Línea Azul a deponer las armas y comprometerse con un camino de paz.
— FPNUL (@UNIFIL_) 15 de junio de 2024
A principios de esta semana, Hezbollah lanzó la mayor andanada de cohetes y drones hasta ahora contra Israel desde que comenzó la guerra en Gaza el 7 de octubre. Esto se produjo cuando Israel incrementó sus ataques contra los comandantes y la infraestructura de Hezbollah en el sur del Líbano.
Aumento de los combates
Durante ocho meses, Hezbollah ha prometido continuar los ataques en el norte de Israel para alejar a las fuerzas israelíes de la guerra en Gaza. Si bien tuvieron altibajos en distintos momentos, los ataques transfronterizos han seguido siendo persistentes.
Pero el aumento más reciente de los combates ha generado preocupación de que la violencia pueda desbordarse. La semana pasada, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, prometió restablecer la seguridad a lo largo de la frontera “de una forma u otra”.
Los ministros de extrema derecha de su gabinete han ido más allá: el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, pidió una guerra abierta y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, pidió una invasión terrestre.
El martes, un ataque en la aldea de Jouaiya, en el sur del Líbano, mató al comandante de campo Taleb Abdallah, considerado el miembro de mayor rango de Hezbollah que murió durante ocho meses de hostilidades.
Al día siguiente, el alto funcionario de Hezbollah, Hashem Safieddine, dijo que el grupo “aumentaría la intensidad, fuerza, cantidad y calidad de nuestros ataques”.
El aumento continuó hasta el sábado, y Hezbollah dijo que apuntó a la base de Meron en el norte de Israel con “misiles guiados” y envió “drones de ataque” hacia otra base israelí.
Mientras tanto, el ejército de Israel dijo que su “avión atacó a un terrorista de Hezbolá” en la zona de Aitaroun, en el sur del Líbano. Por otra parte, también dijo que se disparó artillería “para eliminar una amenaza”.
Los combates se producen mientras Estados Unidos y Francia han estado trabajando para lograr un acuerdo negociado. El viernes, el Ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, dijo que Israel no se uniría a un marco trilateral propuesto por Francia.