Real Madrid: Con Camavinga al volante es mejor y más divertido
El Madrid mejoró su comportamiento en el día en el que tomó decisiones más lógicas. La primera, correr. El toque de Ancelotti funcionó y los jugadores saltaron al campo con otra actitud. Mordieron desde el primer minuto y así ganar es más fácil.
Luego está lo de colocarlos en campo como es debido. Camavingaaunque Carletto lo vea alocado, es la mejor opción para el pivote. Bellingham, cerca del área, tiene más opciones de marcar. Si se lesiona un central, pues se pone a otro, aunque sea de la cantera. Y así, el Madrid se deshizo de Osasuna como lo hizo el año pasado.
Galones para Camavinga
Camavinga cogió los planos y el Madrid construyó un buen partido de fútbol. El francés firmó su mejor partido de la temporada, omnipresente en todas las zonas del campo. En defensa sostuvo al equipo y con el balón le dio al Madrid ritmo y verticalidad. Sí, muchas veces arriesga en zonas del campo en las que no debe, pero el balance al final casi siempre sale positivo. El encuentro ante Osasuna deja claro que el centro del campo debe ser Camavinga-Valverde-Bellingham, con la opción de completarlo con Luka Modric o Brahim. Pero a los mandos, Camavinga.
Mbappé sigue cabizbajo
El buen partido ante Osasuna no sirvió para que Mbappé se diera una alegría. El francés anda con la cabeza abajo, presionado ante la falta de puntería y ahogado en su posición de delantero centro. Sin espacios, Mbappé es menos Mbappé. Las cosas no le están saliendo al francés, que dibujó sus mejores jugadas en tierra de Vinicius, pegado a la banda izquierda. Ahí sí es imparable y Ancelotti para darle cariño le puso ahí los últimos 15 minutos. Se fue sin gol, no obstante.
El Bernabéu también le notó la ansiedad y no paró de regalarle cariño, consciente de que para ganar títulos en mayo harán falta los goles de Mbappé.
Asencio y Lunin, ¡vaya dos asistencias!
Dos de los cuatro goles llevaron el sello de dos actores secundarios a los que nadie esperaba en ataque: Asencio y Lunin. El canterano se estrenó en el Madrid con un pase de 40 metros a Bellingham que habría firmado Fernando Hierro. Y en la segunda parte apareció el portero ucraniano para dibujar un espectacular pase con el que dejó solo a Vinicius, que hizo el 3-0. Tanto el defensa como el portero se llevaron todos los abrazos en la celebración, por delante de los autores de los goles.
El Bernabéu por fin tuvo a Güler
El Bernabéu suplicó a Ancelotti que sacara a Güler y con el marcador a favor cedió el italiano. 20 minutos para el turco, que siempre deja cosas. Hay pocos jugadores en LaLiga más elegantes y bonitos de ver que Arda, que salió con ganas y dejó un pase espectacular para Fede Valverde. Sus intervenciones siempre provocan los ¡ooh! del Bernabéu, que quiere verle mucho más.
Brahim empieza a recuperar su sitio
Otro jugador que siempre lo hace bien es Brahim. El malagueño entró en lugar de Rodrygo y el Madrid lo notó para bien. Brahim ofrece mucho trabajo y con el balón en los pies regala todos los repertorios del juego. El delantero tiene desborde, último pase, control del juego… Se marcó un partidazo y lanzó un mensaje: quiere un sitio en el tridente de ataque o en el centro del campo. Hoy en día es más que Rodrygo.