El fútbol no se para
Que hayamos jugado este partido… no hay por dónde cogerlo”. Luis Garcíaentrenador del Alavés. “El fútbol hoy importaba muy poco”. ponerse al díaentrenador del Mallorca. “Es muy duro no poder estar allí con ellos” (entre lágrimas). Vicente Morenoentrenador de Osasuna y vecino de Massanassa, una de las localidades más afectadas. “Podíamos haber apoyado un poco más, pero se decidió que había que jugar”. Pezzolanoentrenador del Valladolid. “Nada que celebrar, no se debería haber jugado”. Míchelentrenador del Girona. “Nuestra mente está en Valencia”. Borja Jiménezentrenador del Leganés. “No tiene ningún sentido jugar”. Simeónentrenador del Atlético. “Un recuerdo para las víctimas, familiares y todos los afectados”. Diego Martínezentrenador del Granada. “Yo habría suspendido toda la jornada”. Películaentrenador del Barcelona. “La catástrofe está muy por encima del fútbol”. Manolo Gonzálezentrenador del Espanyol. “El fútbol ahora mismo es secundario”. García Pimientaentrenador del Sevilla. “Lo importante es lo que está pasando en Valencia”. Imanolentrenador de la Real. “Hay cosas mucho más importantes que el fútbol”. Valverdeentrenador del Athletic. “Todos estamos muy afectados por lo que está pasando”. Pellegrinientrenador del Betis. “Lo lógico sería que no se hubiese jugado”. giráldezentrenador del Celta. “Sin duda se debería haber suspendido la jornada”. Bordalásentrenador del Getafe.
Hasta aquí, los 16 cuyos equipos tuvieron que disputar la jornada de la vergüenza.
“El mejor mensaje no es parar, salvo las zonas afectadas”. Javier Tebaspresidente de LaLiga.
Hasta aquí, la otra parte.
De esas zonas afectadas, Baraja y marcelinoentrenadores de Valencia y Villarreal, tiraron de redes para dejar sus emotivos mensajes. Ancelotique iba a rendir visita a Mestalla con el Real Madrid, aprovechó el lunes la previa de Champions para rematar la faena: “No tengo ninguna gana de hablar de fútbol”.
Mira que es difícil poner de acuerdo al gremio en cuestión, pero la patronal futbolística lo ha conseguido con su lamentable falta de sensibilidad y con ese torpe barniz de solidaridad que pasó por colaborar con una campaña que ni siquiera era propia, sino de Cruz Roja. Y entrenador hay sólo uno, que futbolistas hay más de 20 en cada equipo. Los hemos visto exhibir camisetas solidarias, los hemos visto llorar después de meter un gol, los hemos visto caerse de la convocatoria por no encontrarse en condiciones, los hemos visto ayudar en las tareas de limpieza… los hemos visto humanos, que era de lo que se trataba como mínimo en momentos tan delicados. Como a los aficionados, por otra parte. Guardando emotivos minutos de silencio y volcándose en la ayuda.
No se paró, no. Resultará difícil olvidar el fin de semana en el que nuestra competición se llenó de barro.