El Kremlin intenta calmar los temores sobre el futuro de Telegram tras la detención de su CEO en Francia
París (CNN) –– El Kremlin está tratando de calmar los temores de que el arresto del fundador de Telegram, Pavel Durov, en Francia, pueda afectar la plataforma de mensajería, que es extremadamente popular en Rusia y juega un papel clave en la coordinación del esfuerzo bélico en Ucrania.
El portavoz del Gobierno de Rusia, Dmitry Peskov, les dijo a los periodistas este martes que los llamados a los usuarios para que eliminen sus mensajes sensibles en la aplicación, incluidos los del editor del medio de noticias estatal ruso RT, eran “absolutamente estúpidos”.
Peskov agregó que aunque las acusaciones contra Durov, quien nació en Rusia pero también tiene ciudadanía de Francia y los Emiratos Árabes Unidos, eran “serias”, las autoridades francesas tendrían que presentar evidencia “igualmente seria” para respaldarlas.
“De lo contrario, se tratará de un intento directo de restringir la libertad de comunicación. Incluso podríamos decir que se tratará de una intimidación directa a la cabeza de una gran empresa. Es decir, habrá política de por medio, algo que el señor Macron negó ayer”, afirmó Peskov.
Rusia y Francia, ¿en conflicto por detención de fundador de Telegram?
La decisión del Kremlin de calmar las preocupaciones sobre la seguridad futura de Telegram subraya lo importante que se ha vuelto la aplicación para el ejército ruso.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo este lunes que la decisión de presentar cargos contra Durov “no era de ninguna manera política”, una declaración poco común ya que los líderes franceses a menudo evitan discutir casos penales para evitar cualquier sugerencia de que la política influya en los asuntos judiciales.
El lunes, la fiscalía de París anunció una serie de cargos contra Durov, entre ellos acusaciones de que su plataforma era cómplice de ayudar a blanqueadores de dinero, narcotraficantes y personas que difundían pornografía infantil. Los fiscales también acusaron a Durov de negarse a cumplir con la exigencia de las autoridades francesas de ayudar a interceptar comunicaciones potencialmente ilícitas.
Tras las conversaciones con su homólogo yemení, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirmó, sin pruebas, en una conferencia de prensa, que “claramente secuestraron a Durov por consejo de alguien y lo están amenazando con un castigo terrible, aparentemente con la esperanza de obtener de alguna manera acceso a códigos de cifrado”.
Con alrededor de 950 millones de usuarios, Telegram es una de las aplicaciones de mensajería más populares del mundo. Su fuerte cifrado de extremo a extremo, su moderación al limitar contenido y su funcionalidad (que les permite a los usuarios compartir archivos más grandes, videos más largos y fotos de mayor calidad que muchos de sus competidores) la han vuelto extremadamente popular tanto en países donde la libertad de expresión está restringida como en zonas de guerra como Ucrania, donde se ha convertido en una herramienta vital para que los funcionarios ucranianos compartan actualizaciones militares y advertencias sobre ataques aéreos.
“Es muy cómodo y muy seguro”, afirmó Lavrov.
Esas mismas características también convirtieron a Telegram en una herramienta de comunicación clave para el ejército ruso y los blogueros pro-Kremlin. Un popular bloguero ruso pro-guerra con más de 780.000 seguidores compartió una publicación en la que decía que la decisión de Francia de arrestar a Durov significaba que “en esencia, el jefe de comunicaciones de las Fuerzas Armadas de Rusia fue detenido”.
Otro bloguero militar menos seguido publicó una foto con las palabras “por Pavel” en un misil presuntamente destinado a Ucrania, que este lunes fue alcanzada por el mayor ataque aéreo desde que comenzó la guerra.
El bloguero Aleksei Sukonkin dijo que Telegram es “la base de las comunicaciones militares”, aunque los funcionarios del Gobierno ruso disputan públicamente dicha afirmación.
“Telegram es una alternativa poderosa al sistema oficial de información y, por supuesto, una fuente de información más eficiente; Telegram es también el principal servicio de mensajería civil en Rusia, prácticamente no controlado por los servicios de inteligencia occidentales, así como una poderosa fuente de publicidad y una plataforma para blogs personales”, afirmó Sukonkin. “Todo esto está en peligro”.
La popularidad de Telegram entre los blogueros militares prorrusos y el apoyo activo del Kremlin a Durov son un tanto sorprendentes considerando que el empresario tecnológico se negó a proporcionar a Moscú datos de los usuarios de su empresa anterior, una red social similar a Facebook llamada Vkontakte (VK).
Posteriormente, Durov dimitió como CEO de VK y vendió sus acciones por millones de dólares. Tanto él como Telegram tienen ahora su sede en Dubái.
–– Clare Duffy de CNN contribuyó a este informe.