El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, consolida su poder al comenzar su segundo mandato | Política Noticias – xflupdate
Después de una aplastante victoria en febrero, este hombre de 42 años se dispone a gobernar durante otros cinco años con un control casi total del parlamento y otras instituciones estatales.
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, prestará juramento para un segundo mandato, aprovechando una ola de popularidad que lo ha ayudado a consolidar su poder e influencia en el país.
El hombre de 42 años, que se describe a sí mismo sin disculpas como un “dictador tranquilo”, fue reelegido en febrero con el 85 por ciento de los votos. Está previsto que gobierne otros cinco años con un control casi total del parlamento y otras instituciones estatales.
El ex publicista y alcalde prestará juramento el sábado en el Palacio Nacional de la capital, San Salvador.
A la ceremonia asistirán dignatarios como el rey español Felipe VI y el presidente argentino Javier Milei, con quien Bukele comparte la admiración por el expresidente estadounidense Donald Trump, cuyo hijo y homónimo también asistirá al evento.
El viernes, los preparativos de la toma de posesión se vieron interrumpidos por informes de que la policía frustró un complot para detonar explosivos en lugares de todo el país.
Bukele disfruta de índices de aprobación altísimos debido a su brutal represión contra las bandas criminales, a la que se le atribuye haber devuelto una sensación de normalidad a una sociedad fatigada por la violencia.
La campaña ha generado críticas de grupos de derechos humanos, pero ha convertido a Bukele en el líder más popular de América Latina, según una encuesta regional.
El partido Nuevas Ideas de Bukele obtuvo una victoria casi limpia en las elecciones legislativas, donde obtuvo 54 de 60 escaños.
Sin embargo, los expertos advierten que su prolongada luna de miel con los votantes puede estar llegando a su fin a medida que las preocupaciones económicas superan a las preocupaciones de seguridad en el discurso público, en medio de una elevada deuda gubernamental y un rápido aumento de los precios de los bienes de consumo en un país donde vive más de una cuarta parte de los seis millones de habitantes. en la pobreza.
Mientras tanto, la inflación de los alimentos ha superado los aumentos salariales, mientras que la deuda pública se ha disparado durante su mandato a más de 30 mil millones de dólares, o el 84 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país.
Las pandillas como 'cáncer'
Bukele tendrá aún más poder en su segundo mandato después de que la asamblea legislativa aprobara una reforma que le facilitará la aprobación de cambios constitucionales.
El presidente se ha reído de las críticas a las tendencias autoritarias, pero sólo pudo buscar la reelección después de que un fallo leal de la Corte Suprema le permitió eludir una prohibición constitucional en mandatos sucesivos.
“Lo que ha demostrado es que la ley es irrelevante y que él puede hacer lo que quiera, como quiera”, dijo a la AFP el experto en políticas públicas Carlos Carcach, calificando a Bukele de un presidente “todopoderoso”.
Con su vestimenta preferida de jeans y gorra de béisbol, el millennial Bukele llegó al poder en 2019 prometiendo aplastar a las pandillas del país, a las que atribuye unos 120.000 asesinatos en tres décadas, más que las 75.000 vidas perdidas en la guerra civil de El Salvador de 1980 a 1992.
Durante el primer mandato de Bukele, las autoridades detuvieron a más de 80.000 presuntos mafiosos bajo un estado de emergencia vigente desde marzo de 2022 que permite el arresto sin orden judicial.
Su gobierno también construyó la prisión más grande de América Latina para retenerlos.
El resultado, se jactó Bukele, ha sido convertir “la capital mundial del asesinato, el país más peligroso del mundo, en el país más seguro del hemisferio occidental”.
Pero esto ha tenido un costo.
Human Rights Watch y Amnistía Internacional han informado sobre asesinatos y torturas de detenidos, y de miles de personas inocentes –incluidos menores– entre los arrestados.