La guardia costera china dice que “permitió” a Filipinas evacuar a un enfermo en el Mar de China Meridional
PEKÍN (Reuters) – La guardia costera de China dijo que por razones humanitarias “permitió” a Filipinas evacuar a una persona que había enfermado en un oxidado buque de guerra varado en el Second Thomas Shoal, una afirmación que la guardia costera de Manila calificó de “ridícula”.
“Esta declaración confirma el despliegue ilegal de buques dentro de nuestra ZEE (zona económica exclusiva) y resalta la opinión de su gobierno de que la preservación de la vida y el bienestar humanos requiere aprobación”, dijo el portavoz de la Guardia Costera de Filipinas (PCG), Jay Tarriela, en X.
En un comunicado, la Guardia Costera china dijo que había monitoreado toda la operación de rescate el domingo, que según un portavoz se realizó a pedido de Filipinas.
La guardia costera filipina informó entonces de “numerosas maniobras de obstrucción y retraso” por parte de la guardia costera china mientras llevaba a cabo la evacuación médica.
Hace un mes, el PCG acusó a su homólogo chino de bloquear una evacuación médica del buque de guerra, calificando las acciones de “bárbaras e inhumanas”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo el mismo día que China permitirá a Filipinas entregar suministros y evacuar personal si Manila notifica a Beijing antes de una misión.
Filipinas tiene soldados viviendo a bordo de un buque de guerra viejo y oxidado en el Second Thomas Shoal, que Manila encalló deliberadamente en 1999 para reforzar sus reivindicaciones marítimas.
La Armada china se ha enfrentado varias veces con las fuerzas filipinas que intentaban reabastecer al barco encallado.
China reclama como territorio propio la mayor parte del Mar de China Meridional, vía clave para el comercio marítimo por valor de 3 billones de dólares anuales. Pekín rechaza el fallo de 2016 de la Corte Permanente de Arbitraje con sede en La Haya, que afirmó que sus amplias reivindicaciones marítimas no tenían fundamento jurídico.
(Reporte de Liz Lee y la redacción de Shanghai; Reporte adicional de Mikhail Flores y Karen Lema en Manila; Editado por Michael Perry, Muralikumar Anantharaman y Miral Fahmy)